¿Tienes propósitos para este 2023?
Como parte de las festividades de fin de año se da un momento simbólico para hacer la transición entre el año viejo y el nuevo, que está representado por comer una uva por cada campanada del reloj, haciendo un total de 12.
Mucha gente aprovecha cada uva para pedir un deseo o evocar un propósito para el próximo año. La mayoría de estos son situaciones que podemos lograr con cambios en nuestros hábitos.
¿Para qué sirve tener propósitos al iniciar el año? Es cierto que cualquier momento es bueno para empezar lo que sea que queramos hacer, pero, plantearlo al inicio del año parece darle un impulso casi mágico de comenzar junto con otra cosa que también empieza y que podrías avanzar al ritmo del calendario.
Los propósitos de año nuevo son, básicamente, metas que queremos lograr. Pero, en muchos casos, a pesar de que sean cosas importantes, es muy común que no logremos alcanzarlas. ¿Por qué? Antes de clavarnos en cosas como el autosabotaje o que alguien te salga con que “no lo deseabas lo suficiente”, pensemos en cosas mucho más simples.
Es probable que la meta que te fijaste era muy alta para el tiempo en que te propusiste lograrla. Por ejemplo: si quiero correr un maratón y me plateo hacerlo para febrero, la relación entre la complejidad de la meta y el lapso para lograrla no están balanceados, ya que necesito entrenar para logarlo y esto no sucederá en un mes.
Muchas veces, esta es la razón principal por la que no logramos lo que nos proponemos y lo abandonamos. ¿Qué podemos hacer? Fijarnos metas más cercanas y realizables o ponernos tiempos en los que sí podamos cumplirlas.
Otra opción es hacer un plan de acción en el que puedas desmenuzar tu meta y dividirla en objetivos más pequeños que, ya en conjunto, te lleven a lograr lo que quieres.
Los propósitos de Año Nuevo pueden ser una ocasión perfecta para que cambies algo que no te está funcionando o que logres algún objetivo que deseas y que mejorará tu estilo de vida.