Día del Niño: Celebremos sin Contaminar
Los niños son las criaturas más mágicas de la Tierra. Su risa, sus sonrisas y su inocencia los convierten en las personas más preciosas. Cada 30 de abril, celebramos el Día del Niño y el mundo se vuelve más brillante, colorido y alegre. Este día especial está pensado para reconocer a estas pequeñas estrellas y darles toda la magia que necesitan para ser felices. Y para aprovecharlo al máximo, debemos asegurarnos de que nuestra diversión no se traduzca en una contaminación adicional.
¿Qué es el Día del Niño?
El Día del Niño se celebra en todo el mundo en distintas fechas. Es un día especial para los niños, concebido para hacerles regalos, jugar y darles la atención que se merecen. En este día se reconocen las aportaciones únicas y especiales de los niños a las familias y a la sociedad, y aprovechamos para reafirmar sus derechos a la educación, la salud, la igualdad y la protección.
Historia del Día del Niño
El Día del Niño se remonta a 1925, cuando Elias Parks, un famoso pensador estadounidense, propuso que el Día Nacional del Niño se celebrara el 1 de junio. Este día se hizo popular en Estados Unidos y en 1929 el Koala Club de Pittsburgh nombró el primer Día Nacional del Niño. Posteriormente, el día se amplió al ámbito internacional y su fecha se cambió al 30 de abril, conmemorando el nacimiento de un médico estadounidense.
Fue en 1954 cuando las Naciones Unidas establecieron el Día Universal del Niño, que se celebra el 20 de noviembre. Este día pretende reconocer y proteger los derechos de los niños, destacar su presencia y fomentar la investigación sobre las condiciones que hacen que los niños y los adultos vivan vidas independientes pero unidas.
Celebrar sin contaminar en el Día del Niño
¿Qué mejor que celebrar a los niños en su día especial sin dañar la naturaleza, sin comprometer la salud de los más pequeños, ni el futuro del planeta? Por eso, al pensar en las celebraciones infantiles, debemos tener cuidado de que sean divertidas y animadas, sin perder de vista el impacto que pueden causar cuando acaba el día.
Elige un regalo ecológico
En lugar de regalar juguetes de plástico, elige un regalo más respetuoso con el medio ambiente. Busca juguetes de madera o fibras naturales, 100% reciclables y que proporcionen la misma diversión a los niños.
Organiza relevos y concursos
Los juegos y los deportes en equipo son la mejor manera de interactuar y divertirse. Para que estas actividades no contaminen el medio ambiente, elige las que no generen muchos residuos. En lugar de caramelos para los ganadores, dales premios ecológicos, como semillas o plántulas, y haz una nueva actividad para sembrarlas.
Hacer manualidades
En lugar de comprar regalos caros, piensa en hacerlos con tus propias manos, con materiales reciclados o que ya tengas en casa. De este modo, se reducirán los residuos y la huella ecológica de la celebración infantil.
La comida y las bebidas
Cuando se trata de fiestas infantiles, parece que nunca hay suficiente comida y bebida. Para dar un enfoque ecológico a esta parte, puedes servir fruta o comida preparada que no requiera muchas envolturas. Los sándwiches siempre son buena opción y puedes aocmpañarlos con bastones de verduras crudas con algún aderezo o limón. Esto no sólo reducirá los residuos, sino que también aumentará la energía de los niños y les proporcionará una experiencia más sana. En vez de platos y vasos desechables usa unos de plástico que puedes reutilizar en otras fiestas. O si necesitas utilizar desechables, que cada invitado ponga su nombre a su plato y vaso para evitar el uso excesivo de estos.
El mundo no sería nada sin las sonrisas de nuestras pequeñas estrellas. Todos los años, en las celebraciones infantiles, no olvides pensar en el medio ambiente. Nos podemos divertir mucho sin aumentar los niveles de contaminación ni de desperdicio de alimentos. Asegurémonos de celebrar el Día del Niño sin dañar el planeta ni el futuro de nuestras personas más preciosas.